¿Alguna vez pensaste en emprender y ser tu propio jefe? La transición de empleado a emprendedor puede ser una de las decisiones que dan más miedo pero que pueden darte mayor felicidad. Según una reciente encuesta del Centro de Investigación Pew, la mayoría de los trabajadores independientes (62%) dicen estar extremadamente o muy satisfechos con su trabajo, en comparación con el 51% de los que no son independientes. Además, han demostrado que trabajar por cuenta propia brinda una inmensa satisfacción y plenitud, te ayuda a aliviar el estrés y los sentimientos abrumadores de trabajar para alguien más.
Los empleados pueden sentir ansiedad debido a la falta de control sobre sus carreras. Un gran ejemplo de esta preocupación es la reciente ola de despidos que tanto llamó la atención. Cuando los trabajadores pierden sus empleos inesperadamente, puede crear un sentimiento de incertidumbre muy grande. La libertad y el control son esenciales para los seres humanos, y cuando no los tienen, el estrés generado es agotador.
Si tenés un fuerte sentimiento de que estás destinado a ser tu propio jefe, tengo buenas noticias para vos, ¡es posible! Sin embargo, antes de poder hacer esa transición, vas a tener que superar el miedo y la duda que pueden estar frenándote. Acá tenés algunos consejos sobre cómo manejar esa voz interna para que puedas pasar de ser un empleado a convertirte en un emprendedor.
Identificá tus miedos
El primer paso es descubrir qué es lo que te está frenando. Algunos miedos comunes al cambio de carrera incluyen:
Miedo al fracaso
Miedo a empezar de nuevo
Miedo a ganar menos dinero
Miedo a lo que puedan pensar los demás
Miedo a ser demasiado viejo o demasiado joven
Es importante hacerle frente a tus miedos directamente. Empezá escribiéndolos y cuestionando si están basados en hechos o suposiciones. Buscá emprendedores que hayan hecho con éxito la transición de empleado a propietario de un negocio para aprender cómo superaron preocupaciones similares. Vale la pena recordar que el miedo suele surgir cuando estás a punto de embarcarte en algo grande. De hecho, puede ser un signo positivo, indicando que te estás desafiando y aspirando a la grandeza.
Usá el miedo como combustible para emprender
El miedo es una experiencia común para todos. Siempre está presente, pero no debería ser un obstáculo para alcanzar nuestros objetivos. Una forma de superarlo es avanzar de a pequeños pasos.
Cuando nos sentimos atascados, generalmente es porque estamos pensando demasiado en lo que podría suceder. Es importante tomar acción para recuperar nuestro poder. Otro consejo efectivo es cambiar nuestra mentalidad. En lugar de enfocarnos en el fracaso potencial, deberíamos preguntarnos: "¿Qué estoy renunciando al no intentarlo?" De esta manera, podemos cambiar nuestra perspectiva y ganar el coraje para tomar riesgos.
Planifica y prepárate
Para reducir tu riesgo, es importante establecer metas realistas y claras. Al emprender, comenzá definiendo lo que quieres lograr y creá un plan para alcanzar ese objetivo. Desglosar tu meta principal en pasos más pequeños puede hacerla más manejable y menos intimidante. Un paso crucial para alcanzar tu objetivo es adquirir conocimientos y experiencia en el campo de tu interés. Como nuevo emprendedor, vas a necesitar ocupar varios roles al principio, así que es una buena idea buscar capacitación en áreas como marketing y contabilidad. Además, deberías considerar obtener más títulos o certificaciones que puedan aumentar tu credibilidad en el mercado.
Arma un consejo de asesores
Tener un sólido sistema de apoyo es crucial para el éxito como propietario de un negocio. Además de tu familia y amigos, también deberías formar un consejo de asesores que pueda guiarte y brindarte orientación. Buscá personas en tu red personal que puedan aportar valor a tu negocio. Buscá individuos exitosos en tu campo para aprender cómo superaron obstáculos y desafíos. También considerá contratar a un coach de carrera y/o negocios. Un coach profesional puede ayudarte a desarrollar la mentalidad adecuada y proporcionarte la responsabilidad necesaria para alcanzar el éxito.
Celebra pequeñas victorias
Es importante tener en cuenta que emprender no es un proceso rápido y fácil. Lleva tiempo y vas a encontrar muchos desafíos en el camino. Por lo tanto, es crucial reconocer las pequeñas victorias y el progreso logrado. Celebrar estas victorias ayuda a seguir motivados y comprometidos, y nos permite mantener una actitud positiva y reconocer nuestro progreso. Sin embargo, la transición de empleado a emprendedor no es para los débiles. Requiere enfoque, flexibilidad, determinación y una cantidad increíble de perseverancia. Pero si es la elección correcta para vos, podría ser la mejor decisión que hayas tomado.
Conclusión
En conclusión, emprender puede ser una decisión desafiante y abrumadora, pero también puede ser una de las elecciones más satisfactorias que hagas en tu carrera. La libertad y el control que vienen aparejadas con ser tu propio jefe pueden brindar una inmensa alegría y aliviar el estrés y los sentimientos abrumadores de trabajar para alguien más. Al identificar tus miedos, usar el miedo como combustible, planificar y prepararte, armar un consejo de asesores y celebrar pequeñas victorias, podés manejar la voz interna que quizás está frenándote y hacer esa transición. Acordate de esto: lleva tiempo, enfoque, flexibilidad, determinación y persistencia, pero si es la elección correcta para vos, podría ser la mejor decisión que hayas tomado.