El soporte automatizado utiliza tecnologías como chatbots, inteligencia artificial y respuestas automáticas para gestionar consultas sin intervención humana. En el mundo tech, esto es clave para ofrecer atención 24/7 sin saturar a los agentes. Sin embargo, la automatización debe estar bien diseñada para que no frustre a los usuarios. Un buen equilibrio entre soporte automatizado y humano permite agilizar respuestas a preguntas simples sin sacrificar la calidad de la atención en casos más complejos.