El continuous profiling es una técnica de monitoreo que recolecta de forma continua perfiles de uso de CPU, memoria, I/O y otros recursos directamente en producción. A diferencia del profiling tradicional (manual y puntual), esta estrategia permite tener una foto constante del rendimiento real de tu sistema, sin necesidad de reproducir los problemas localmente. Herramientas como Pyroscope o Parca capturan estos datos con bajo overhead, ayudando a identificar cuellos de botella, fugas de memoria o hotspots de código en tiempo real. Además, alinear a Dev y Ops con esta visibilidad mejora la eficiencia del software y permite optimizar costos en entornos cloud donde se paga por cada milisegundo de uso.