El desarrollador backend es el encargado de la lógica del servidor, bases de datos y la arquitectura de una aplicación. Mientras el frontend maneja la interfaz visual, el backend se encarga de que todo funcione detrás de escena. Trabaja con lenguajes como Python, Java, PHP o Node.js, y utiliza bases de datos como MySQL, PostgreSQL o MongoDB. También gestiona APIs, seguridad, autenticación y rendimiento del sistema. Sin un buen backend, una aplicación puede ser lenta, insegura o incluso inservible, por lo que su rol es fundamental en cualquier proyecto de desarrollo.