Es un algoritmo de consenso diseñado para ser más fácil de entender que alternativas como Paxos. Su función principal es permitir que un clúster de servidores funcione como un estado de máquina coherente, incluso si algunos servidores fallan. Es fundamental para la confiabilidad de sistemas distribuidos como bases de datos o registros de configuración. Eleva la resiliencia y simplifica el diagnóstico de problemas de consistencia, y su rendimiento se mide a través de la latencia para alcanzar el consenso.