Es una métrica que mide el tiempo que tarda un nuevo cliente en obtener el primer valor o ""aha moment"" de un producto o servicio. Un TTV bajo es crucial para la adopción y retención de usuarios. Es una manera práctica de alinear los equipos de producto, marketing y éxito del cliente con el impacto real en el negocio. Alinear el presupuesto para mejorar el onboarding y reducir el TTV tiene un impacto directo en la retención y en la eficiencia del Costo de Adquisición de Clientes (CAC).